Sin duda alguna, uno de los mejores placeres de la vida es disfrutar de un buen plato de comida y un buen vino. Siempre que viajo, no puedo evitar perderme por la zona antigua de la ciudad y degustar platos típicos o perderme en alguna tabernita, para catar una buena copa de vino. Su olor, su color, su textura… Esos pequeños detalles que marcan la diferencia. ¿No te pasa lo mismo?. Descubre la bodega Sa Cova.
Comparto contigo esta frase de Alexander Fleming “Si bien la penicilina cura a los hombres, el vino los hace felices”. ¡Y cuánta razón! Y es que, una copita de vino le alegra el día a cualquiera y mejor si es en buena compañía. Por ello, el otro día me fui con mi mejor amigo a visitar la bodega Sa Cova, en San Mateu. La más antigua de la isla de Ibiza.
Esta bodega, creada por el ibicenco Joan Bonet, dispone de 10 hectáreas de viñedos. La primera cosecha comercializada fue en 1990. Joan Bonet, comenzó este proyecto como un hobby y poco a poco lo que parecía un pasatiempo se convirtió en un proceso empresarial serio y contundente. La finca familiar fue añadiendo hectáreas adyacentes hasta llegar a las 10 hectáreas actuales. La finca Sa Cova produce entre 20.000 y 25.000 litros y tiene capacidad para vinificar hasta 60.000 litros. Joan Bonet empezó elaborando vino con la uva monstarell, la clásica de la isla. Con los años fue sumando variedades de uvas. Hoy en día cuentan con temparanillo, monastrell, moscatel, syrah y malvasía.
¿Qué vinos encontraré en la bodega Sa Cova?
Los vinos de esta tradicional bodega se pueden encontrar en tiendas y restaurantes de la isla. Aquí te dejo los vinos que Sa Cova elabora, por si vas a algún restaurante o tienda que los puedas reconocer fácilmente y no tengas ninguna duda.
Sa Cova Blanc de Blancs
Vino Sa Cova Rosado
Sa Cova 9
Vino Sa Cova Privat
Clot D’Albarca
Cuándo ir
La bodega puedes visitarla durante todo el año, con cita previa. Allí podrás comprar el vino que desees. Es una buena opción si quieres llevarte algo a casa o para regalar a tus seres queridos. Les encantará. Aquí puedes ampliar información.
Te recomiendo fijarte en el contraste entre los campos de vides verdes con las casitas blancas ibicencas. Generan un paisaje típico y muy característico de la isla blanca dejándonos en la memoria una postal para el recuerdo.