Ibiza es un lugar fantástico para visitar en verano, gracias a la multitud de cosas que puedo hacer en ella. Si bien Ibiza es conocida por su oferta de ocio nocturno, ni yo, ni los turistas que visitamos la isla en busca de un lugar más tranquilo y apacible vamos a quedarnos sin cosas por hacer. Hay muchas actividades que me ponen en contacto con la naturaleza, así como propuestas culturales que siempre me ayudan a conocer mejor todas las costumbres de los ibicencos (su cultura, su gastronomía, sus fiestas locales, etc).
He preparado esta pequeña lista de sugerencias sobre qué hacer en Ibiza, para que tu próxima visita a la isla no sólo sea igual de provechosa que la mía, sino que lo pases tan bien que decidas repetir el verano que viene.
Sentir la magia de Es Vedrà
El islote de Es Vedrà, situado en Cala d’Hort, es uno de los lugares más simbólicos de la isla, y, si bien no se puede acceder directamente al islote, año tras año miles de turistas vienen a la playa a admirar su esplendor, así como imbuirse de las energías místicas que según los lugareños desprende. No en vano es considerado por muchos ibicencos como el guardián de la isla, que la defiende de energías negativas, yo lo he visitado y he vuelto a casa con una especie de paz interior.
Además, la propia zona cerca de la cala también es de una belleza increíble, por lo que se puede rematar la visita a Es Vedrà con una visita a los alrededores de Cala d’Hort.
Visitar la fortaleza de Dalt Vila
Dalt Vila es una de las visitas más obligatorias que hacer para todos los que visiten Ibiza por primera vez. Se trata de una ciudad amurallada situada en la parte alta de la ciudad de Vila, la capital de la isla, que formaba parte de la parte vieja de la ciudad, lo que se podría llamar como la “ciudad original”. En Dalt Vila hay muchas cosas por hacer: visitar la Catedral de Ibiza, disfrutar de la mejor gastronomía ibicenca en alguno de los bares y restaurantes de la zona, maravillarte con las increíbles vistas que nos regala Dalt Vila del resto de la ciudad, etc. Si bien ir caminando hasta la zona alta de la ciudad puede resultar algo cansado (ya que todo el camino está compuesto por pendientes un tanto pronunciadas), todas las actividades que encontraremos en la zona alta harán que el esfuerzo haya merecido la pena.
Alquilar un barco y disfrutar de las aguas ibicencas
Es uno de los planes que más me gusta repetir en Ibiza. Las aguas cercanas a las costas ibicencas son algunas de las más bonitas de todo el Mediterráneo. Siempre comparo algunas de las playas de Ibiza con las de algunas islas del Caribe, principalmente debido a su fina arena y a sus cristalinas aguas. En los principales puertos de la isla podéis encontrar servicios de alquiler de barcos con el que podréis visitar cualquiera de las calas de la isla, e incluso hacer una escapada en Formentera sin tener que coger el ferry. Yo no tengo título para llevar el barco así que voy con un patrón que lo lleva por mí.